Braulio y Dellymar: la maravilla de ser imperfectos

(Por Dellymar B. Bernal Martínez / Presidenta del Santuario de Animales San Francisco de Asís, Inc.)

Braulio fue abandonado el pasado 4 de abril al mediodía. Estaba desnutrido y se veía aletargado. Tan pronto lo rescatamos, procedimos a bañarlo porque parecía tener un ataque de calor. En el proceso, Braulio comenzó a sangrar por la boca, los ojitos y el ano. Así que corrimos con él a la Clínica Veterinaria de Lajas, donde el amable Dr. Socarrás nos reveló que este nene de solo cuatro meses había sido envenenado con veneno para ratas.

Braulio estuvo una semana hospitalizado, y gracias las diligentes atenciones que recibió en la clínica logró superar la terrible crisis que por poco le roba la vida. No obstante, Braulio sufrió daños neurológicos que le impiden mover con agilidad sus patitas traseras. Aún así, este gigante color ébano corre, juega y mueve la cola con la intensidad de una batidora. ¿Sus pasiones? Las galletitas para perro, chapaletear en la piscina, jugar y comer.

Cada vez que lo miro y veo su cola agitada, sus saltos a medias y la gran lengua colgando de su hocico listo para llenarme de besos, me doy cuenta del poder tan grande que tenemos de salvar y cambiar vidas. Braulio, con su pegajosa alegría y pasión por vivir, me recuerda que nuestras imperfecciones nos hacen únicos y especiales; nos hacen perfectos.

Braulio me enseñó que podemos superar crisis terribles, seguir adelante y ser felices. Ahora nosotros queremos enseñarle que una segunda oportunidad junto a una familia es posible y que estamos listos para cumplirle la promesa de amor, seguridad y adopción.

Si quieres conocer a Braulio, escribe a info@sasfapr.org. Te lo advertimos: si lo conoces, te vas a enamorar.

Para ayudar a nuestro gigante y al resto de los perros y gatos que albergamos en el Sasfapr, puedes hacer un donativo por ATH Móvil al 787-612-8587. Síguenos también en Twitter (@SASFAPR), Facebook (@Sasfapr) e Instagram (santuario.sasfapr) y visita nuestra página web (www.sasfapr.org).

Chanay y Doris: amor a primera vista

Por Doris Figueroa Feliciano / Voluntaria del Sasfapr

Conocí a Chanay el 25 de junio, cuando fue abandonada con una severa infección en la piel a causa de un hongo conocido como “malassezia”. El dolor y la incomodidad por la condición, y el miedo y el trauma del abandono, hacían que Chanay desconfiara de nosotros y que intentara defenderse en cada instante. La paciencia, los mimos y la seguridad que sintió en el Sasfapr, hicieron que esta nena mostrara su verdadera personalidad: cariñosa, juguetona y noble.

Lo nuestro fue amor a primera vista, y mientras ella reaccionaba asustada y comedida con la mayoría de las personas, conmigo se relajaba y movía el rabito. Incluso aprendió a llamarme con un tierno lloriqueo que me hacía correr hacia ella y llenarla de besos y abrazos. Chanay fue mi niña consentida hasta el viernes pasado (15 de noviembre de 2019), cuando la adoptó una pareja maravillosa que la llevó a California.

Ahora Chanay duerme acurrucada en la cama de Kendra y Romain, y seguirá recibiendo los tratamientos para la piel en un ambiente más apropiado para ella; rodeada del amor y la seguridad que se merece.

A Chanay se le cumplió el milagrito de una segunda oportunidad de vida. Y esto me llena de energía para seguir trabajando junto a los amigos del Sasfapr para que el resto de los peluditos que albergamos también logren el milagro de adopción.

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Brisa y Krystal: corazones que se entienden

Por Krystal Aguilar / Auxiliar de manejo y cuidado animal del Sasfapr

Brisa fue abandonada a orillas de una carretera en Cabo Rojo. A pesar de la traición, ella se mantuvo esperando a quienes la dejaron, segura de regresarían a buscarla. Cuando la recibimos en el Sasfapr, estaba sumamente delgada, tenía una infección en la piel y sus orejas estaban deformes porque, al parecer, se las cortaron sin las debidas precauciones y atenciones veterinarias. Brisa les tenía terror a las personas, y no era para menos, pues había sufrido mucho.

Con amor, paciencia y ayudándola a sentirse segura, logramos que Brisa se convirtiera en la hermosa nena sociable, juguetona y cariñosa que es hoy. Esta chica se caracteriza por su buen apetito y la forma en que celebra cuando le llevamos sus platitos de comida. ¿Sus pasatiempos? Comer galletitas para perros, limbers de pollo y mantequilla de maní; disfrutar sus juguetes hasta que “revientan solos”, y dormir totalmente patas arriba. Esa chica tiene estilo, y eso nadie lo puede negar.

Brisa es tan inteligente que a veces siento que me escucha y me entiende, pues siempre que le doy sus baños y le explico por qué son importantes, ella me mira fijamente y mueve su cola. Ella y el resto de nuestros inquilinos merecen tener un hogar. Y eso pido todas las noches; pido que Brisa y el resto de los angelitos del Sasfapr sean adoptados por personas que los cuiden y los amen como los cuidaría y los amo yo.

Si quieres ayudar a Brisa y al resto de los perros y gatos que albergamos en el Sasfapr, puedes hacer un donativo por ATH Móvil al 787-612-8587 o Paypal a info@sasfapr.org

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